DIETA
¿Qué es la dieta mediterránea?
La dieta mediterránea es la forma de alimentación que, desde hace varios siglos, mantienen los pueblos de la ribera del mar Mediterráneo. Es una forma de entender la vida, más allá de sólo relacionarla con una forma de alimentarse, es unir salud y alimentación, alimentarse para vivir mejor. Degustar de la comida en buena compañía, disfrutar de las sensaciones que nos aporta lo saludable.
Aunque el profesor Ancel Keys fue el primero en definirla claramente, ya en textos anteriores se habla de unas costumbres, culinarias y de vida, similares en todos los países de la costa del Mediterráneo.
Saludable. Numerosas investigaciones han afirmado las propiedades saludables de esta dieta.
La dieta mediterránea consiste en un estilo de vida basado en una dieta equilibrada y variada en la que predominan los alimentos obtenidos de los cultivos tradicionales de esta zona goegráfica bañada por el mediterraneo: el trigo, el olivo, la vid y el jamón ibérico.
¿Por qué es una dieta saludable?
Su descubrimiento como dieta saludable se realizó a partir de estudios nutricionales en Grecia donde se detectó una incidencia de arteriosclerosis, enfermedades cardiovasculares y enfermedades degenerativas inferior a la media. Y una mayor esperanza de vida.
Basándose en estos antecedentes, de 1958 a 1964 se realizó un extenso estudio epidemiológico denominado "Estudio de los siete países", dirigido por Ancel Keys, para investigar los hábitos dietéticos de siete países entre los que figuraban cinco países no mediterráneos: Estados Unidos, Japón, Finlandia y Holanda, y tres mediterráneos: Yugoslavia, Italia y Grecia.
Los resultados del estudio mostraron una clara relación entre las características de la dieta y la salud de su población.
El estudio demostró que era el tipo de grasa de la dieta, más que su cantidad, la que estaba relacionada con este riesgo cardiovascular, de modo que un consumo bajo de grasa saturada y mayor de monoinsaturada (los principales alimentos con mayor nivel de grasa monoinsaturada son: aceite de oliva y jamón ibérico puro de bellota, sólo existente en una zona limitada de la península ibérica) y poliinsaturada (pescado) se asoció a una menor frecuencia de enfermedades coronarias y de mortalidad debido a estas patologías. Posteriormente se vio que la dieta mediterránea no sólo protege de la enfermedad cardiovascular, sino que además aporta gran cantidad de antioxidantes (en relación con los alimentos de origen vegetal) que protegen del envejecimiento celular y la carcinogénesis.
El jamón Ibérico es un producto único en el mundo dentro de la denominada dieta mediterránea. Sus especiales características organolépticas y sus propiedades nutricionales le confieren una calidad excepcional, que fundamentalmente viene dada por las particularidades del cerdo Ibérico, su alimentación( criadas en extensivo en sistemas respetuosos con el medio ambiente y el bienestar animal, donde los animales crecen prácticamente en libertad y en donde su alimento principal es la bellota, pastos, raíces y tubérculos entre otros , así como su proceso de elaboración y curado, ligado a un ecosistema de enorme valor ecológico).
En cuanto al perfil de ácidos grasos, es rico en ácidos grasos monoinsaturados, entre los que destaca el ácido oleico y se adecua perfectamente a lo que las recomendaciones dietéticas más recientes consideran como una grasa saludable. Respecto al contenido en colesterol, la tasa (30-40 mg/100 g) es aún más baja que la de carnes magras como pollo o pavo. El jamón Ibérico también se caracteriza por su contenido en vitaminas B1, B6, B12 y ácido fólico, muy beneficiosa para el sistema nervioso y vitamina E, que actúa como antioxidante. Asimismo, es un producto rico en minerales como hierro, fósforo, potasio, magnesio y zinc. Por último, tiene un elevado contenido de proteínas de muy alta calidad y digestibilidad debido a la proteolisis que ocurre durante la maduración de este producto. Recientes estudios indican que además, se trata de un producto hipocalórico, que no engorda y es recomendable en cualquier dieta de adelgazamiento. Igualmente, los oligoelementos (principalmente Fe y Zn) proporcionan efectos muy beneficiosos, entre otros, para niños, deportistas, personas con anemia y como anti-estresante.